Las autoridades francesas han imputado a 25 personas —seis de ellas menores de edad— por su presunta participación en una serie de secuestros e intentos de secuestro dirigidos contra figuras destacadas del ecosistema de criptomonedas en el país. Así lo informó la fiscalía de París en un comunicado citado por el diario Le Monde el pasado 31 de mayo. Con información de Cointelegraph.
Los acusados, con edades comprendidas entre los 16 y los 23 años, estarían involucrados en diversos complots delictivos que han generado preocupación tanto en el sector tecnológico como entre las autoridades de seguridad. De los 25 sospechosos, dieciocho se encuentran actualmente en prisión preventiva, tres han solicitado el aplazamiento de la vista y cuatro están bajo supervisión judicial.
Uno de los casos que habría motivado las detenciones fue el intento de secuestro del 13 de mayo en el distrito 11 de París, donde fueron atacados la hija, el yerno y el nieto de Pierre Noizat, CEO del exchange francés Paymium. Imágenes del ataque circularon ampliamente por redes sociales, mostrando a cuatro personas enmascaradas agrediendo a las víctimas, quienes sufrieron heridas leves. Los autores intelectuales del ataque no han sido identificados.
Los acusados tienen orígenes diversos, incluyendo nacidos en París, Châtellerault, Senegal, Angola y Rusia. Varios de ellos fueron descritos por sus abogados como jóvenes sin historial criminal, atraídos por el dinero fácil y envueltos en una dinámica que se salió de su control.
Este caso forma parte de una tendencia preocupante: el aumento de los secuestros vinculados al sector cripto en Francia durante 2024. En enero, el cofundador de Ledger, David Balland, y su pareja fueron secuestrados. El 1 de mayo, el padre de un millonario vinculado a criptomonedas fue víctima de un hecho similar. Las investigaciones apuntan a posibles conexiones entre estos incidentes, aunque hasta ahora solo han sido detenidos ejecutores y coordinadores logísticos, sin que se conozca la identidad de los autores intelectuales.
La gravedad de la situación ha generado una respuesta institucional. El ministro del Interior, Bruno Retailleau, se reunió a mediados de mayo con representantes del sector para discutir medidas de protección, lo que derivó en una mayor cooperación entre empresas de criptomonedas y fuerzas del orden, incluyendo operativos de seguridad preventiva en domicilios.
Al mismo tiempo, compañías de seguros especializadas en el ámbito cripto están desarrollando pólizas de secuestro y rescate (K&R) dirigidas a inversores en activos digitales, en respuesta a una amenaza que ya no es solo virtual. Según NBC News, al menos tres empresas trabajan en estas nuevas coberturas. Además, firmas privadas de seguridad como Infinite Risks International han registrado un aumento de solicitudes de guardaespaldas y contratos de protección por parte de figuras relevantes del sector cripto, reflejo del creciente temor ante posibles ataques físicos.