La defensa de la exgobernadora de Puerto Rico, Wanda Vázquez Garced, ha solicitado al Tribunal Federal que desestime la acusación emitida por un gran jurado en su contra. Con información de El Nuevo Día.
El abogado de Vázquez Garced, Ignacio Fernández, argumentó que los cargos presentados fallan en establecer el “pro” de lo que se conoce como “quid pro quo”, que consiste en un acuerdo de intercambio, y que el alegado acuerdo no puede ser inferido de declaraciones ambiguas o de la cronología circunstancial de los eventos, sino que debe ser explícito.
La acusación, que incluye también al consultor financiero Mark Rossini y a Julio Herrera Velutini, dueño de Bancrédito International Bank & Trust, alega que los tres conspiraron para que la entonces gobernadora recibiera aportaciones a su campaña electoral de parte del banquero y con la ayuda de Rossini, a cambio de que la mandataria destituyera a George Joyner de la Oficina del Comisionado de Instituciones Financieras (OCIF).
La acusación sostiene que esto se hizo a cambio de poner fin a la auditoría de OCIF que había descubierto transacciones sospechosas en las cuentas de Herrera Velutini. Sin embargo, la defensa argumenta que las acciones de OCIF fueron consideradas por muchos en el sector financiero como desinformadas y de mano dura, y que Herrera Velutini y otros buscaron apoyar a Vázquez Garced para construir una nueva estructura en OCIF que regulara y no persiguiera a los bancos.
La defensa ha enfatizado que en ningún lugar de la acusación se encuentra una “promesa explícita” de Vázquez Garced y ha argumentado que el Ministerio Público “falló en alegar un esquema de soborno bajo los estatutos relevantes”.
El abogado de la exgobernadora también argumentó que los cargos no establecen que Vázquez Garced sabía que su subjefa de personal había enviado un mensaje a una persona que decidió sentarla junto “con tres multimillonarios” en una boda a la que asistió.
Aseguró que ya sentados en la mesa, durante la boda, John Blakeman y Herrera volvieron a intercambiar mensajes sobre el apoyo a la gobernadora para las elecciones. Según los textos, el banquero le indicó a Blakeman que ya tenía “2MM en esta mesa”, pero que tenía que resolver el asunto con OCIF. La defensa de Vázquez Garced insiste en que los cargos deben ser desestimados porque no se ha demostrado que la exgobernadora haya participado en un acuerdo explícito de intercambio.