Abogados del Departamento de Justicia señalaron que Estados Unidos deportaría al exparamilitar colombiano Salvatore Mancuso a Italia en las próximas dos semanas, a pesar de que la nación sudamericana (Colombia) impugnaba de último momento su extradición. Con información de Joshua Goodman / The Associated Press.
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El anuncio se produjo en una audiencia en la corte federal de Washington en la que Mancuso buscaba una orden de un juez para obligar al fiscal general William Barr a trasladarlo de inmediato a Italia, donde también tiene la ciudadanía, después de cumplir una sentencia de 12 años por narcotráfico en Marzo.
Salvatore Mancuso, el excomandante de las Fuerzas de Defensa Unidas de Colombia, conocidas como AUC, argumentó que el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos lo ha “detenido ilegalmente” más allá del máximo de 90 días permitido para la remoción de extranjeros, según una audiencia previa.
En la comparecencia ante el juez Richard León, la fiscal federal adjunta April Seabrook dijo que había estado de acuerdo con los abogados de Mancuso en un borrador de orden que suspendería los procedimientos a la espera de la extradición de Mancuso antes del 4 de septiembre.
Los abogados de Mancuso atribuyeron el retraso de la deportación a la fuerte presión del gobierno de Colombia, que la semana pasada presentó a Estados Unidos lo que dijo que era su cuarta solicitud de extradición.
Una de las solicitudes anteriores fue retirada unilateralmente en julio después de que el equipo legal de Mancuso, encabezado por el abogado defensor de Miami Joaquín Pérez, señalara en un tribunal federal de Estados Unidos que se basaba en una orden de arresto ya cancelada por un juez colombiano.
No está claro qué sucedió con las otras dos solicitudes proporcionadas a EEUU, pero ninguna ha sido reconocida por un tribunal de estadounidense. Si bien los tribunales colombianos han responsabilizado a Mancuso de más de 1,500 actos de asesinato o desaparición forzada, muchos de los delitos no se reconocen como delitos en la legislación estadounidense porque se derivan de su posición en la cadena de mando de las AUC, no de órdenes específicas que dio. En 2001, Estados Unidos designó a las AUC como organización terrorista extranjera.
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“Colombia ha tenido 12 años para formalizar una solicitud de extradición adecuada. La libertad del señor Mancuso no debería soportar el peso de la burocracia gubernamental o los fallos internacionales; tampoco este Tribunal debe ser el escenario donde se planteen tales fallas para legitimar una detención ilegal”, escribieron Pérez y otros dos abogados, Héctor Mora y Manuel Retureta, en su memorando previo a la audiencia.
Si regresa a casa, los abogados de Mancuso argumentan que es probable que lo encarcelen, o incluso que lo maten, a pesar de haber cumplido con sus obligaciones en virtud del acuerdo de paz que negoció en 2003, que limita las penas de prisión a ocho años para los líderes de las milicias que confiesen sus crímenes.
