El mundo de las finanzas descentralizadas, mejor conocido como Defi, es uno de los más propensos a los ataques y estafas. Por ello, muchos inversores minoristas que se adentran en estas plataformas corren el riesgo de ser estafados debido al poco conocimiento o desinformación. Uno de los mayores riesgos del mundo DeFi es el Rug Pull.
Rug Pull, ¿qué es exactamente?
Un Rug Pull o en castellano «Tirón de Alfombra» se trata de una especie de manipulación en el mundo de las criptomonedas. Este concepto es lo que caracterizaríamos como una estafa a los inversores.
En pocas palabras, un Rug Pull se da cuando, los creadores o desarrolladores de un proyecto relacionado al sector cripto y blockchain, desaparecen abruptamente después de recaudar fondos de sus inversores a través de procesos de inversión inicial, como las ofertas iniciales de monedas, donde las personas tienen la oportunidad de adquirir por primera vez un token vinculado a un proyecto.
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¿Cómo funciona?
En principio, los actores maliciosos o estafadores crean un nuevo proyecto y un token, utilizando muchas veces programación y líneas de código idénticas a las de otros proyectos/tokens, las cuales modifican parcialmente para hacer ver el proyecto como real y sacarlo así adelante de cara a los inversores. Desde el inicio y en medio de todo esto, un factor determinante que utilizan los estafadores del proyecto es la promoción agresiva, por medio de estrategias de marketing diversas que apuntan a posicionar la estafa y el token en la mira de la mayor cantidad de inversores posibles.
¿Cómo identificar una estafa?
Para evitar ser víctima de un rug pull es importante actuar con cautela y antes de invertir en un activo, se recomienda investigar de qué trata el proyecto y quiénes son sus creadores. Esto se puede revisar a través de su sitio oficial, whitepaper y redes sociales.
ESET, compañía líder en detección proactiva de amenazas, comparte recomendaciones para evitar ser víctima de este esquema de fraude:
Investigar quiénes son los creadores del proyecto. Es importante conocer la historia de los fundadores. Además de rechazar cualquier criptomoneda que tenga fundadores con mala reputación, también es preferible evitar cualquier proyecto que no tenga un sólido historial.
Estar atentos a las promesas que son demasiado buenas. Con la intención de atraer a un gran número de inversores, algunos proyectos pueden prometer un retorno de la inversión excesivamente grande y poco realista. Si garantiza un rendimiento de 5 a 10 veces la inversión inicial, esto suele ser una señal de advertencia, una bandera roja. Incluso pueden contratar celebridades y personas influyentes para promocionar sus estafas.
Fluctuaciones del valor de los criptoactivos. Si bien un aumento en el precio de la criptomoneda en la que uno invierte es beneficioso para los inversores, si el pico es demasiado alto, podría indicar que se trata de un caso de explosión fabricada, donde los desarrolladores de proyectos inflan este precio para atraer inversores con propuestas interesantes. Poco después de esta explosión, los creadores pueden desaparecer con los activos o venderlos para hacerse con el dinero de los inversores. Una fluctuación alarmante sería, por ejemplo, que la moneda aumentara cien veces su valor.
Copias de seguridad. Es vital invertir en proyectos que estén respaldados por auditorías de código y revisiones constantes. Además, el apoyo de personalidades de renombre en el mundo de las criptomonedas es una buena señal.
Proyecto de liquidez. La capacidad de intercambiar activos del proyecto por otras criptomonedas más estables es un buen indicador de la solidez del proyecto, aunque no el único. Esto se puede verificar observando la capacidad de los fondos de liquidez.