El Departamento de Justicia de EEUU ejecutó un acuerdo trilateral con los gobiernos de Nigeria y el Bailía de Jersey, para repatriar a Nigeria aproximadamente 308 millones de dólares, atribuibles a la cleptocracia de ex El dictador nigeriano Sani Abacha y sus conspiradores.
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En 2014, un juez emitió un fallo por la pérdida de aproximadamente 500 millones de dólares ubicados en cuentas de todo el mundo, como resultado de una queja de decomiso civil que el Departamento de Justicia presentó contra más de 625 millones atribuibles al lavado de dinero, producto de la corrupción de Abacha. Después de que las apelaciones en los Estados Unidos se agotaron en 2018, el gobierno de Jersey hizo cumplir la sentencia estadounidense contra más de 308 millones ubicados en esa jurisdicción.
“El general Abacha y sus compinches robaron a los nigerianos de vastos recursos públicos y abusaron de los sistemas financieros estadounidenses e internacionales para lavar sus ganancias criminales”, dijo el fiscal general del Departamento de Justicia. “El acuerdo histórico de hoy devuelve al pueblo de Nigeria cientos de millones de fondos malversados a través de un proceso legal que garantiza la transparencia y la rendición de cuentas”.
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Los bienes perdidos representan dinero corrupto lavado durante y después del régimen militar del general Abacha, quien asumió el cargo de presidente de la República Federal de Nigeria mediante un golpe militar el 17 de noviembre de 1993, y mantuvo ese cargo hasta su muerte en junio. 8, 1998. La denuncia alega que el general Abacha, su hijo Mohammed Sani Abacha, su asociado Abubakar Atiku Bagudu y otros malversaron, apropiaron indebidamente y extorsionaron a miles de millones del gobierno de Nigeria y otros, luego lavaron sus ganancias criminales a través de instituciones financieras estadounidenses y la compra de bonos respaldados por los Estados Unidos.
Según el acuerdo trilateral firmado, Estados Unidos y Jersey transferirán el 100 por ciento de los activos netos confiscados a la República Federal de Nigeria para apoyar tres proyectos de infraestructura crítica en Nigeria que fueron previamente autorizados por el presidente nigeriano Muhammadu Buhari y la legislatura nigeriana.
