Nuevo golpe a las «asociaciones cannábicas» de Barcelona por tráfico de drogas

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CCD La Guardia Urbana de Barcelona ha precintado y clausurado la actividad de otra «asociación cannabica» de la Ciudad Condal por un presunto delito de tráfico de drogas en una operación que ya ha causado una detención y que pone el cerco en unos clubs que a menudo sobrepasan su actividad cooperativista y acaban promocionando el consumo de sustancias como la marihuana o el hachís.

El pasado 7 de marzo efectivos de la policía local también detuvieron a un hombre que salía de la asociación cannabica, situada en el céntrico barrio del Raval, con más de 200 gramos de hachís, resina de hachís y 3.945 euros en efectivo. Un botín que no encaja con el que debería llevar un «socio» de estas cooperativas para pequeños consumidores.

Al día siguiente, agentes de la Unidad de Investigación y de la Unidad Territorial de Ciutat Vella de la Guardia Urbana procedieron a la entrada y registro por orden judicial de esta asociación cannabica por un presunto delito de tráfico de sustancias estupefacientes.

En el registro se intervinieron 4,3 kilos de marihuana, 945 gramos de hachís, 22 cigarrillos de marihuana, un pastel de hierba, 20 botes con aceite de hachís, 5 botes con resina de hachís, 825 gramos de placas de resina de hachís, 519 euros, 3 ordenadores, un disco duro, un datáfono y diferente documentación. Durante la operación, se levantaron también tres actas de intervención de drogas a turistas -que no debería poder acceder a estos locales destinados solo a residentes- que salían del mencionado local.

Tanto desde las administraciones catalanas como desde las cooperativas de consumo de cannabis se critica la promoción de Barcelona como un destino «turístico» que ofrezca la marihuana como un reclamo, sin embargo, aunque las webs de entidades como la Federació d’Associacions Cannàbiques Autoregulades de Catalunya (FedCAC) piden a las cooperativas que impongan un «periodo de carencia» de 15 días por cada nuevo socio para evitar que los turistas puedan acceder, esa norma rara vez se cumple y no es raro ver a promotores de estos clubs ofreciendo membresías a los turistas más jóvenes en el centro o en zonas de ocio de la capital catalana.

Con información de ABC

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