Casi dos décadas después de que se destapara el mayor esquema Ponzi de la historia, el nombre de Bernie Madoff continúa generando pérdidas y litigios en el sistema financiero global. El banco HSBC ha revelado que provisionó 1.100 millones de dólares para hacer frente a reclamaciones de inversionistas que perdieron dinero en los fondos vinculados a Madoff Securities. Con información de Quartz.
La razón: uno de los negocios europeos del banco prestó servicios de custodia, administración y gestión a fondos que, sin saberlo, invertían directamente en las operaciones fraudulentas de Madoff. Los demandantes alegan que HSBC no verificó adecuadamente la existencia real de los activos ni estableció controles internos suficientes, lo que permitió que el fraude continuara durante años sin ser detectado.
En un fallo reciente, el Tribunal Supremo de Luxemburgo aceptó parcialmente las demandas, reconociendo las reclamaciones relacionadas con valores, aunque rechazó las vinculadas a efectivo. HSBC mantiene la apelación sobre esa decisión.
La noticia impactó en los mercados: las acciones del banco cayeron cerca de un 1 % tras el anuncio, aunque acumulan un alza del 28 % en lo que va de año. Los analistas consideran que, pese al monto elevado, la cifra es “manejable” para una entidad del tamaño del HSBC.
El caso revela hasta qué punto el colapso de Madoff en 2008 sigue dejando huellas profundas. Más allá de las pérdidas económicas, el riesgo reputacional vuelve a poner en evidencia la necesidad de fortalecer los mecanismos de debida diligencia, verificación de activos y supervisión de terceros.
